La tasa máxima de flujo de aire alcanzada durante la inspiración. En pacientes que respiran de forma espontánea, es proporcional al esfuerzo inspiratorio, que aumenta en respuesta a una mayor demanda respiratoria (por ejemplo, debido a ejercicio, enfermedad pulmonar, acidosis) y disminuye con la debilidad muscular respiratoria (por ejemplo, debido a fatiga, enfermedad neuromuscular, sedación).